Un violento incendio afectó a más del 70 por ciento de la infraestructura del Cesfam Campanario de la comuna de Yungay en la región de Ñuble. Afortunadamente, el hecho ocurrió en horas de la tarde cuando usuarios y funcionarios ya se habían retirado del establecimiento. No obstante, las consecuencias de este siniestro impactarán severamente a las y los trabajadores de ese centro de salud y a cerca de 5 mil personas que se atienden allí.
Para Katherine Isla, secretaria de la asociación de trabajadores del Cesfam, “esta tragedia pudo haberse evitado. Nuestro centro de salud estaba sobrecargado en su capacidad eléctrica. Sin embargo, nunca se hizo una correcta normalización del sistema para aumentar su capacidad de manera segura. Esto pudo haber sido mucho peor si hubiese sucedido un par de horas más temprano”.
Ante el inminente riesgo de derrumbe de ciertas áreas de la infraestructura dañada, se decidió clausurar el centro de salud y continuar con parte de las prestaciones en una sede municipal cercana al Cesfam. Por este problema, numerosas autoridades llegaron hasta el lugar el día miércoles 22 para proponer soluciones. No obstante, ninguna de las propuestas era viable: las carpas del Ejército estaban en malas condiciones para ser utilizadas y los containers que ofrecieron aún no han sido encontrados en los lugares donde se suponía que estaban guardados.
Sobre las proyecciones de una solución más definitiva, Katherine Isla se manifiesta escéptica: “hace 12 años que la comunidad de Yungay espera que el liceo, dañado por el terremoto de 2010, sea repuesto y aún no hay ni un proyecto concreto, ni de las autoridades locales ni regionales ni nacionales, entonces ¿qué podemos esperar nosotros para nuestra Atención Primaria?”.
Sobre este lamentable hecho, Gabriela Flores, Presidenta de la CONFUSAM, expresó su preocupación por “las y los trabajadores del Cesfam Campanario, quienes en medio de una crisis sanitaria, hoy tienen que enfrentar además el quedarse sin su centro de salud de la noche a la mañana. Cada trabajador cuida y quiere su establecimiento. Por esta razón manifiesto todo el apoyo de nuestro gremio para ellas y ellos, quienes están comprometidos con una comunidad que también se verá seriamente afectada por la negligencia de quienes están a cargo de la mantención de la infraestructura”.