En 2023 el alcalde de Tierra Amarilla se hizo famoso al denostar públicamente a las y los trabajadores de la atención primaria del cesfam Salvador Allende de esa comuna durante una movilización, luego de un proceso judicial hubo mediación y ya se comenzaron a aplicar las medidas reparatorias.
A principios de noviembre de 2023, el alcalde de Tierra Amarilla, Cristóbal Zuñiga, increpó a gritos a las y los funcionarios del cesfam Salvador Allende, diciéndoles -entre otros-, que no se preocupaban de la salud de vecinos y vecinas, solo de sí mismos y que volviesen a trabajar o se fueran. Lo anterior, a raíz de una movilización por la no renovación de contratos, falta de insumos y no contar con director de salud municipal ni del establecimiento.
Wilfredo Neyra, presidente de Confusam Atacama, expresa que “consideramos grave y repudiables sus dichos, por lo cual se tomaron todas las medidas legales para denunciar prácticas antisindicales”.
Luego de transcurrido un año y reconocida la gravedad de la situación cometida por la autoridad municipal, la Justicia estableció cuatro acciones reparatorias hacia las y los trabajadores afectados: disculpas públicas de la máxima autoridad municipal; indemnización de 2, 5 millones de pesos para la asociación base; 10 horas de clases de libertad sindical y protección de los derechos fundamentales para alcalde, jefaturas y trabajadores de salud municipal; además, el reintegro de una funcionaria desvinculada por sus declaraciones en los medios de comunicación.
En estos momentos, ya se publicaron las disculpas a través de las redes municipales. Sin embargo, como aun no asumía el alcalde Zuñiga su segundo periodo, estas las realizó el subrogante Franco Aranda; los recursos se transfirieron a la asociación, se reintegró a la trabajadora y las clases deben efectuarse.
Al respecto, el dirigente Wilfredo Neyra señala que esperaban que fuese quien “cometió ese acto vergonzoso hacia las y los trabajadores quien diese las disculpas públicas. En ese sentido, es como un triunfo a medias, pero estamos muy conformes con las clases de libertad sindical, porque todo trabajador y trabajadora tiene el legítimo derecho de denunciar lo que no le parece”.